Excelente presentación al aire libre en el patio del Palacio Cousiño, en abril/2009. Una iniciativa que esperaría se repitiese más a menudo.
Pero como no todo es 100% bueno, habían muchos desubicados que fumaban en el lugar, molestando con la porquería que le obligaban a los niños, bebés y asistentes a respirar. ¿Por qué el ser humano espera el castigo de una ley para comportarse? ¿No hay conciencia ni sentido común?